Los aperitivos son la mejor carta de presentación en una celebración y, en las fiestas navideñas, siempre llevan la voz cantante. ¿Necesitas inspiración para deleitar a tus invitados? Aquí tienes varias ideas de entrantes fáciles para sorprender en Navidad. Recuerda que si quieres formarte en el campo de la alimentación puedes capacitarte como Experto en Nutrición y aprender a elaborar las mejores combinaciones culinarias.
Índice de contenidos
Entrantes originales, con mucho color y una buena presentación
¿Ves los entrantes como una preparación complicada y que supone mucho tiempo? ¡Hay opciones tan sencillas como deliciosas! Existen varias propuestas para preparar entrantes fáciles y rápidos para sorprender en Navidad a todos los tipos de paladares.
Para conseguir aperitivos espectaculares y fáciles, más que optar por recetas laboriosas, es clave cuidar la presentación. Lo esencial es que los aperitivos entren por la vista y que cautiven también el estómago. Y sobre ello, los colores y los distintos sabores toman una gran relevancia.
También es buena idea hacer un mix entre aperitivos fríos y calientes como preludio a las comidas y cenas navideñas. Eso sí, es importante que los entrantes sean exquisitos, pero que no llenen demasiado a nuestros invitados, para poder comer bien las comidas siguientes. Elige cuatro o cinco aperitivos y deja paso a los próximos platos. Así todo estará perfectamente equilibrado.
8 entrantes fáciles para sorprender en las comidas y cenas de Navidad
Tartaletas, canapés variados, croquetas, tablas, aperitivos con marisco, recetas para dipear… En estas fechas especiales, hay un gran abanico de entrantes fáciles y rápidos para una comida familiar de Navidad y aperitivos para sorprender en una cena de Nochebuena o Nochevieja. Miles de combinaciones de sabores, texturas y experiencias culinarias que no dejarán a nadie indiferente.
A continuación, te presentamos varios entrantes fáciles y rápidos para sorprender a tus comensales. Ricos, sabrosos y listos en un periquete, ¡lo tienen todo! Reúne los ingredientes, un poco de paciencia y mucha creatividad y, con todo, el resultado será exquisito.
1. Tartaletas y montaditos
Además de concentrar una mezcla de sabores y texturas en una pequeña porción, las tartaletas y los montaditos siempre dan una buena imagen en la mesa. Te damos varias ideas para prepararlos:
- Tartaletas de champiñones con queso gratinado y cebolla caramelizada
- Montaditos de tortilla de patata.
- Montaditos de ensaladilla rusa.
- Tartaletas de solomillo de ternera y setas.
- Tartaletas de queso de cabra, pera, avellana y miel.
- Montaditos de morcilla y pimientos.
- Montaditos de queso gorgonzola, nueces y mermelada de moras.
- Tartaletas de salmón ahumado, guacamole y queso Philadelfia.
- Tartaletas con gambas, mango y lima.
- Montaditos de brandada de bacalao y pimientos del piquillo.
2. Canapés de Navidad
En los entrantes fáciles y rápidos para sorprender no pueden faltar los canapés de Navidad. Además, el catálogo es infinito y no te faltarán ideas para sorprender. Por ejemplo, los entrantes con hojaldre para Navidad son infalibles. Te dejamos algunas propuestas para inspirarte:
- Canapés con anchoas.
- Canapés con mini hamburguesas.
- Volovanes rellenos de salmón ahumado y mandarina.
- Volovanes de salmorejo.
- Canapés con brandada de bacalao, espárrago y jamón ibérico.
- Hojaldres rellenos con gambas o langostinos y base de mango.
- Canapés de sobrasada y huevos de codorniz.
- Canapés de foie, queso crema y cebolla caramelizada.
3. Croquetas
Las croquetas son un clásico que nunca falla. Y es que, ¿quién se resiste a una deliciosa croqueta? Puedes prepararlas en casa con antelación y congelarlas. Tienes varias opciones: croquetas de jamón, de setas, de marisco, de cocido, de quesos…
4. Dips con cremas untables
Cada vez es más común preparar entrantes con patés o cremas untables para dipear: hummus clásico de garbanzos, hummus de remolacha, paté de olivas, paté de mejillones, cremas libanesas, entre muchas otras, que puedes acompañar de unos crudités de zanahoria, pepino y remolacha, en lugar de palitos de pan.
5. Tartares
El tartar tiene un toque sofisticado y es uno de los entrantes delicatessen que siempre da la talla, además de ser una opción sana y muy ligera. Puedes optar por el clásico tartar de atún y tenerlo listo en menos de 30 minutos. Tan solo tienes que marinar el pescado en mostaza, aceite, pimienta, unas gotas de zumo de limón o lima, cebollino y semillas de sésamo.
Otra opción es el tartar de salmón, mango y aguacate. Un entrante a todo color y repleto de sabor que entra por la vista. Para elaborarlo es imprescindible usar un aro de repostería y montar el tartar intercalando una capa de mango, otra de aguacate y otra de salmón y así, hasta terminar y decorar con unos germinados.
6. Brochetas
Si buscas ideas para entrantes gourmet puedes añadir unas brochetas en tus aperitivos de Navidad. Es una forma de ofrecer pinchos, pero más original y ligera.
Algunos ejemplos: brochetas de tomates cherry y huevo de cordorniz, de langostinos y mango, de bacalao en aceite de oliva virgen extra, de fruta, de calabacín, tomate, cebolla, pimiento y brócoli, etc.
7. Aperitivos con marisco
Entre los aperitivos para sorprender en una cena o comida de Navidad no pueden faltar recetas con marisco. Hay varias opciones; desde los cócteles de marisco y salpicones de gambas hasta las vieras a la parmesana, pasando por las gambas, los mejillones, las cigalas, los berberechos y otros mariscos que encajan a la perfección.
8. Tabla de quesos
Las tablas de queso son grandes protagonistas en los aperitivos de Navidad. Son entrantes fáciles y rápidos que nunca defraudan, y más si tienes amantes del queso entre tus invitados. Puedes acompañarlas de un jamón ibérico y un buen vivo, y será todo un manjar para los comensales.
Para elaborar una tabla de quesos perfecta debes optar por la variedad, para evitar la repetición. Para ello, juega con quesos de diferentes sabores y texturas: de cabra, de oveja y de vaca. Combina unos que sean más blandos, semiduros, azul, untables… y añade algunos más tiernos y semicurados y otros curados y viejos. También puedes alternar la intensidad; unos más frescos, otros más fuertes.
A modo práctico, por ejemplo, puedes elegir un Cambebert o Brie, un queso manchego más maduro y un Edam o Gruyère. Para poner el broche de oro añade un queso azul o un curado aromático. Córtalos en diferentes formas: cuñas, lascas, rectángulos, en taquitos…
Para el acompañamiento elige panes artesanos, picos y regañas crujientes. Añade mermeladas y compotas, además de fruta fresca como uvas y frutos rojos, y fruta deshidratada (ciruelas, dátiles, pasas, higos…). Finalmente, puedes incorporar aceitunas y encurtidos para conseguir una buena combinación.
