La medicina natural proporciona terapias alternativas que pueden contribuir a mejorar el bienestar y la calidad de vida de las personas. Existen varios opciones que alivian o contribuyen al tratamiento de diferentes dolencias y patologías. ¿Te interesa? ¡Quédate con nosotros! Te contamos todo lo que debes saber sobre ello. Eso sí, si tu objetivo es formarte en la aplicación de medicina alternativa, te recomendamos el Curso Acupuntura para especializarte en la técnica de esta terapéutica.

¿Cuáles son las terapias alternativas y complementarias?

Las terapias alternativas están en pleno auge. Cada vez hay más personas que apuestan por la medicina natural para mejorar su salud y bienestar. Actualmente, la sociedad apuesta más por el uso de plantas medicinales y otros métodos naturistas para combatir algunas afecciones, abusando menos de los fármacos.

Acupuntura, Aromaterapia, Homeopatía… seguro que te suena, ¿verdad? Estas son algunas de las terapias alternativas que se utilizan para aliviar el dolor o como forma de prevención de algunas enfermedades. Los métodos de medicina alternativa aplican tratamientos que devuelven el equilibrio energético al organismo para influir positivamente en el estado de salud.

Por norma general, la medicina alternativa se suele aplicar por profesionales de la salud en complementación a los tratamientos de la medicina convencional. Es importante elegir a especialistas cualificados y con experiencia, teniendo en cuenta la validez y fiabilidad de cada tipo de terapia.

Clasificación de la medicina alternativa según su tipología

Según la clasificación del Centro Nacional de Medicina Alternativa y Complementaria de Estados Unidos, los tipos de terapias alternativas se clasifican en cinco categorías.

  • Sistemas integrales. Tienen una aplicación teórica y práctica. Ejemplo de ello son la Homeopatía, la Naturopatía o la Medicina Tradicional China (aquí destaca la Acupuntura, por ejemplo).
  • Terapias biológicas. Son las terapias que aplican sustancias, alimentos y vitaminas para mejorar algún problema de salud. Los suplementos dietéticos y los productos herbodietéticos son algunos ejemplos.
  • Métodos de manipulación basados en el cuerpo. La intervención se centra en el movimiento de una o más partes corporales. En este sentido, destaca la quiropráctica, la osteopatía, la reflexología, la aromaterapia y otros tipos de masajes.
  • Técnicas de control mental y corporal. El objetivo es conectar cuerpo y mente a partir de técnicas que promueven un estado de salud favorable. Un buen ejemplo de ello es el yoga, que además de contemplarse como una práctica física, también implica beneficios a nivel psíquico. La música, la danza, la meditación y otras terapias creativas también se engloban en este grupo.
  • Terapias energéticas. Se basan en el equilibrio energético para mejorar la salud. El Reiki, Tai Chi, Qi gong o la terapia floral son algunos de los métodos más característicos. En este grupo también se incluyen las terapias bioelectromagnéticas o magnetoterapia que implica el uso no convencional de campos electromagnéticos.

9 terapias alternativas para cuidar tu bienestar

La Organización Mundial de la Salud (OMS)  apoya el uso de las terapias convencionales y de las alternativas “cuando estas han demostrado su utilidad para el paciente y representan un riesgo mínimo”.

A continuación, te presentamos 9 tipos de terapias alternativas que debes conocer. ¡Sigue leyendo!

Acupuntura

Es una de las terapias alternativas de tradición milenaria, ya que sus orígenes se encuentran en la medicina tradicional china. La acupuntura se basa en el uso de agujas finas en determinados puntos del cuerpo para aliviar y tratar varios tipos de dolores. Es uno de los métodos más empleados para reducir dolores de espalda o de cabeza, entre muchos otros.

Son tales sus beneficios sobre el dolor que el 90% de los servicios médicos de Reino Unido y el 70% de Alemania incorporan la acupuntura como tratamiento de afecciones.

Reflexología

La reflexología podal aplica el masaje en ciertas zonas del pie para tratar varios problemas de salud. Y es que, ¿sabías que los distintos órganos, aparatos y sistemas se representan en el pie a través de determinados puntos? Esta terapia alternativa puede ser efectiva para mejorar estados como la hipertensión, el estreñimiento, la retención de líquidos o, incluso para controlar el estrés y la ansiedad.

Reiki

Se trata de una pseudoterapia de origen japonés. Esta alivia algunas enfermedades a través de la transmisión energética a partir del uso de las manos.

El Reiki actúa en profundidad atacando a la raíz del problema físico o emocional para sanar el patrón de conducta que causa el desequilibrio en el organismo. Esta terapia alternativa se puede utilizar para liberar emociones, aumentar la energía, revitalizar el cuerpo, fomentar la relajación o eliminar el estrés.

Fitoterapia

¿Quién no ha recurrido a una manzanilla por problemas digestivos? Como bien sabrás, el uso de plantas medicinales es muy útil para tratar dolencias y enfermedades. La fitoterapia utiliza las hierbas como forma de tratamiento alternativo a los fármacos o, en muchos casos, como complemento.

Las plantas medicinales pueden administrarse en forma de infusión o cápsulas para obtener los beneficios de sus principios activos. Se trata de una de las terapias alternativas más populares.

Flores de Bach

Las flores de Bach son un conjunto de esencias naturales que se utilizan para tratar el estrés, la ansiedad y la depresión. Estas flores son fruto del descubrimiento de Edward Bach. Este médico y homeópata encontró 38 flores silvestres en la región de Gales que, según sus comprobaciones, sanaban diferentes problemas psicológicos.

Por ejemplo, la cerasifera se utiliza para tratar el miedo al descontrol. También destaca el olmo, que es efectivo para quienes se sienten abrumados por sus responsabilidades o la aulaga que puede beneficiar a aquellos que han perdido la esperanza.

Homeopatía

Este sistema de medicina alternativa se basa en la doctrina de “lo similar cura lo similar”. Es decir, la causa de los síntomas de una afección en una persona sana sería la cura para lo similar en una persona enferma.

Se utiliza para prevenir y tratar patologías como la gripe, la migraña o la diarrea. También es efectiva para reducir infecciones de repetición como el dolor de garganta, por ejemplo.

Osteopatía

Otra de las terapias alternativas es la osteopatía. Se trata de un método que emplea el masaje y la manipulación de articulaciones para tratar enfermedades. Está indicada para abordar problemas de espalda y de cervicales que pueden generar ansiedad, migraña y cefaleas. Asimismo, se ocupa de afecciones oculares y auditivas.

Cromoterapia

Esta método alternativo utiliza los colores para alcanzar el equilibrio mental y corporal. Es un método que usa las tonalidades para dar respuestas químicas y psicológicas que determinen un diagnóstico en el paciente.

La cromoterapia se basa en los siete colores del espectro de la luz del Sol: el rojo, el naranja, el amarillo, el verde, el azul, el índigo y el violeta. Asimismo, se tiene en cuenta sus  distintas vibraciones magnéticas. Y es que cada color emite una vibración y efecto diferente. Por ejemplo, el verde se indica para tratar el cansancio físico y los trastornos del sueño, ya que estimula la relajación. El rojo para el funcionamiento del corazón, por su contribución a la mejora de la circulación.

Aromaterapia

¿Sabías que el aroma a vainilla llama a la relajación y que el olor a cítricos nos ayuda a sentirnos más despiertos? Se trata del poder de la aromaterapia. Esta terapia alternativa utiliza compuestos aromáticos para mejorar la salud física y psicológica de la persona.

Los aceites esenciales que se utilizan en la aromaterapia tienen varios usos:

  • Por inhalación. Es la forma más común. Pueden mezclarse los aceites con agua y se utiliza en casos de problemas respiratorios y de piel.
  • En forma de masaje. Se diluyen los aromas con agua y después se realiza el masaje. Muy indicado en casos de contracturas.
  • En baños aromáticos para activar la circulación y estimular la relajación.
  • Con cataplasmas para tratar afecciones de piel o molestias musculares.
  • No se recomienda de forma interna, ya que su ingesta puede ser tóxica y letal.